viernes, mayo 19, 2006

El Código Da Vinci

Acabo de recibir la 3ra invitación para ir a ver la película del Código Da Vinci, y en caso de que no seas una de las personas que me invitó: No pienso pagar ni 0.50 por ver esa película, así tuviera la fortuna de Bill Gates.

Me tiene harto todo esto del Código Da Vinci en la tele, las revistas, en internet y en cualquier medio de comunicación que a uno se le ocurra. La historia es interesante la primera vez, cuando a uno le sorprende la idea de que Jesús se casó y todo eso. Pero más allá de esto, no veo ninguna razón para tener que padecer un super película taquillera de la industria de Hollywood, si ya se cuál es la historia, y cual es su pésimo final.

No me entiendan mal, leí el libro, mejor dicho, lo leí con ávidez en 3 días y me pareció que algunas de las cosas que decía eran "mind blowing", como dirían en EEUU (aún así no son más que una ficcioncita, puras conjeturas sin pruebas). Pero el libro, además de carecer totalmente de alguna cualidad literaria que lo vaya a inmortalizar, cae en sus últimos capítulos en la peor predictabilidad y facilismo de resolución. Y para un thriller, la predictabilidad es lo peor que le puede pasar.

Si quieren leer un thriller decente, lean "El Nombre de la Rosa" o "El Péndulo de Foucault", ambos de Umberto Eco, que tienen la brillante cualidad de realmente hacernos pensar, y llegar a un final que no se ve venir desde 50 páginas atrás. En cuánto al Código, esperaré que llegué a HBO.

I think I'm Paranoid

Evidentemente nuestro presidente sufre de algún tipo de paranoia. Las últimas medidas de seguridad en torno a Anchorena, junto con las que ha venido tomando desde la campaña 2004, hacen pensar que teme algún atentado en cualquier momento.

Yo no sé si tiene algúna información adquirida por las agencias de seguridad nacional uruguayas (si es que existen tales organismos, porque seguridad en este país, solo tenemos la de que cada 20 años nos afanan la guita los banqueros), sobre alguna célula terrorista de ultra-derecha que planée un atentado "a la Bin Laden" contra su persona, porque de otro modo no se explica la reciente prohibición de usar el espacio aéreo de la estancia vacacional de la presidencia.

Más llamativo es el hecho de que medidas como estas no se toman desde tiempos de la dictadura, cuando los gobernantes de turno tenían buenos motivos para pensar que alguien intentaba matarlos (y mucha más gente tenía buenos motivos para pensar que los gobernantes eran los que iban a matarlos). No es esta la primera coincidencia Vázquez con dichos gobernantes, pero esperemos que sea de las últimas.

Sólo por si el presidente lee esto: NADIE está intentando matarlo, aunque muchas personas quiseran tener los huevos para hacerlo.

viernes, mayo 12, 2006

Cuando escuché la noticia de que encontraron al asesino del chofer de Raincoop Edward Cal, me invadió una sensación de alegría. Al instánte, cuando me entere que era un policía, que supuestamente debería "proteger y servir", como dice el lema de la policía yanqui, me invaden la rabia y el asco. Me entero a los pocos segundos que no sólo mato a Cal, si no también a un taxista y posiblemente a algunas personas más. Ahí empieza la sensación de impotencia, de creer que en este país la gente honrada está a merced de unos pocos inadaptados que hacen lo que quieren, saliendo impunes en muchos casos, y cuando no, con penas de prisión que se reducen, o son "conmutadas" por la generosidad de nuestro Ministro del Interior. Lo que se requiere para que los criminales desistan de sus acciones, son castigos más duros, ejemplificantes, políticas de "tolerancia cero" como la que llevo a NY de ser la capital mundial del crimen a una de las ciudades con menor tasa de asesinatos por persona. Acá en Uruguay, con nuestro 30 años de pena máxima (que con la nueva Ley de Cárceles pueden quedarse en 20) estamos lejos de ejemplificar. Me queda la triste tranquilidad de que en nuestro sistema carcelario, el tiempo que se pasa adentro es un detalle, pues las condiciones de encarcelamiento son tan patéticas que nadie querría estar ni 5 minutos adentro.

lunes, mayo 08, 2006

El mundo, hoy.

Mercosur o no mercosur?, desde hace años es Vox Populi que el mercosur funciona mucho peor de lo que quisieramos, en especial para Uruguay y Paraguay. Los "grandes" del bloque constantemente pasan por encima de los otros 2, para mayor provecho de ellos. Lo que si es nuevo, es que Uruguay este considerando retirarse del mismo (o no, según en que momento se le pregunte a nuestro presidente).

Pero peor que contradecirse, es la actitud del gobierno de considerar que los Uruguayos somos todos idiotas, y que los periodistas solo inventan cosas para perjudicarlos. Es un hecho: Vázquez dijo que nos iríamos del mercosur, Astori presentó su renuncia cuando le dijeron como tenía que hacer su presupuesto, Diaz aumentó la inseguridad, Gargano hace menos por las relaciones exteriores de este país que el Goyo Álvarez por los derechos humanos. Todas estas cosas llegaron a oídos del público mediante informes de la prensa que fueron desmentidos o descalificados por "atacar" al gobierno. Desconozco casos de otros países donde los gobiernos puedan (tenemos como excepción al de G.W.Bush) descalificar a la prensa de tal manera, esperando que sus ciudadanos crean solo lo que se les informa del gobierno. Quizá como obtuvieron una mayoría simple en Octubre 2004, creen tener el poder de hacer lo quieran, que el pueblo les dará la razón.
Esto tiene una implicación gravísima de fondo: que la prensa libre es un instrumento de desinformación, y que los uruguayos estamos sometidos al decir del gobierno y no al revés.

Entonces, la pregunta que queda es: ¿Los uruguayos somos idiotas? ¿o es sólo idea del gobierno?